6 diciembre 2024

Molestias de las ranas de la charca

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Con fecha del miércoles, 14 de noviembre, apareció en Diario de Navarra un reportaje sobre las molestias ocasionadas por las ranas de la charca de Plaza Lakuondo (perteneciente a Mutilva).

Parece ser que vecinos de la zona están recogiendo firmas para solucionar el problema causado por los ruidos de las ranas. Una de las propuestas que plantean es la limpieza en invierno de la charca.

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El invierno pasado la charca se vació y limpió: ¿has apreciado mejoría?

Puedes leer el artículo completo a continuación. 

Algunos las aman y otros las odian. Y es que hacen tanto ruido… Las ranas, una de las especies autóctonas de Navarra, han pasado de crear un exótico ambiente a convertirse en un problema que los vecinos de la muga entre el Soto de Lezkairu y Mutilva quieren solucionar “cuanto antes”.

Todo comenzó en los meses estivales. Vecinos de lacalle Adela Bazo y plaza Lakuondo, principalmente, se vieron asociados con unos inquilinos que para nada avisaron de su llegada. Ranas por doquier en la charca que bordea las citadas avenidas y que aspira a convertirse en un pequeño humedal urbano. Los anfibios, lejos de convertirse en un reclamo para quienes disfrutaban de un paseo al sol por las inmediaciones, pasaron a ser una “verdadera molestia” desde el atardecer y durante la noche.

El ruidoso croar de las ranas para llamar la atención de las hembras o avisar de algún suceso no común como una tormenta o un peligro inminente se convirtieron en pesadilla de viaje para los vecinos. “Era una locura. Abrías la ventana y parecía que tenías las ranas en casa. Yo, que vivo en un cuarto piso, llegué a dudarlo. Y eso que sé de sobra que es imposible. Pero es que la intensidad era tal…”, relataba Juana Lizarraga, una de las nuevas residentes en la zona.

Idéntica opinión compartían Miguel Cereceda, Aitor Lujambio y Estíbaliz Aranguren, amigos y residentes en la plaza Lakuondo. “Menuda ruidera. Se te metía el sonido en los oídos. Menos mal que las viviendas están insonorizadas y con las ventanas cerradas molestaban poco, pero era una pasada”, contaban los tres esta misma semana, admitiendo que era “agradable” sentarse a tomar una cerveza cerca del parque (en el bar ‘El Rincón de Pensar’) y escuchar de cerca a estos animales. “Un pequeño placer si piensas que vives en mitad de una ciudad, pero eso: puntualmente y por la tarde. No durante las noches, que no te dejaban ni abrir la ventana en los días de más calor”, añadía Aranguren.

APROVECHAR EL FRÍO

Precisamente era en ese momento, cuando se imponía el silencio del anochecer sobre la zona, en el que la sinfonía del croar de las ranas adquiría todo el protagonismo. Para sorpresa de los viandantes (muchos disfrutaban de un paseo tranquilo con la ‘música de fondo) y disgusto de los vecinos. Y antes de que la historia vuelva a repetirse, es ahora, con el mal tiempo de estas semanas, el frío y la época del año en la que nos encontramos, cuando quienes se sintieron molestos con el croar de las ranas buscan no repetir experiencia la próxima primavera.

Por ello, se encuentran a día de hoy recogiendo firmas entre vecinos y conocidos para formalizar una petición que pretenden entregar al Ayuntamiento. “No sabemos muy bien cómo hacer. Quizá a través de la plataforma change.org sea más sencillo”, se cuestionaban. “El hecho, sea como fuere, es no volver a ‘sufrir’ los ruidos procedentes de la charca”, decían.

En este sentido, una de las alternativas que tienen pensado presentar ante los responsables de Medio Ambiente es estudiar la posibilidad de limpiar el estanque durante el invierno, cuando no estén las ranas criando. “Creo que podría ser una solución positiva para todos, ya que también se constató que algunos vecinos habían localizado roedores por las inmediaciones de la charca”, relataba Victoria Jarrete,otra de las interesadas en el cambio.

Fuente: Diario de Navarra

0 comentario en “Molestias de las ranas de la charca

  1. ¿Quitar las ranas de una charca que es su habitat «natural» porque croan? ¿Quitamos también los perros que ladran???? Me parece una barbaridad la propuesta…

  2. Jajajaja…. estamos locos todos! Vamos a cortar los árboles porque suenan con el aire, por que ensucian la acera… vamos a paralizar las obras porque hacen ruido también y porque no, los niños que lloran les tapamos la boca? Vecinos, civismo.
    La mayoría de quejas se tienen que traducir en ser educados y limpios con nuestro entorno.

  3. Que exagerados!! Si son tres días!
    Igual prefieren escuchar tráfico, pitidos, y los ruidos típicos de una ciudad y que se los coman los mosquitos, que vendrán si se van las ranas..

  4. Marina, thinkingbike, Arturo: ¡completamente de acuerdo con vosotros! Hemos elegido vivir en una vivienda cerca de la naturaleza, en un entorno que no es el tradicional urbano, con coches, ruidos molestos de vecinos… ¿y ahora nos molesta la Naturaleza? Tengo hijos, y entre explicarles que cierro la ventana porque oigo los ruidos de la carretera o porque las ranas están croando, prefiero lo segundo. Ah, por cierto, los niños me piden que abra las ventanas porque les entusiasma escuchar las ranas.

  5. A mi lo que me preocupa es las ratas de considerable tamaño que he visto varias veces por las orillas de la charca. Me parece algo insalubre, desagradable y peligroso. Hay niños jugando por esa zona.

  6. Se nos esta yendo la cabeza…El comentario de «me gusta escucharlas a la tarde en el bar, pero no a la noche en casa» lo corrobora. Queremos un mando a distancia para silenciar cuando nos interese a la naturaleza? Llevamos ya 3 veranos viviendo en la zona con esta agradable acustica, y si hay gente que se ha comprado un piso después, quizás debería haberse pasado antes a ver donde está ubicado y cual es la realidad. No hemos visto ningún roedor en la charca, y no entiendo porque hay que vincular a los niños en todo. El parque de Mugartea es un campo, y vivir cerca de el tiene sus lógicas consecuencias.

  7. Soy vecina de Lezkairu desde 2014. Cuando oí las ranas por primera vez me vinieron a la cabeza recuerdos de sonidos que no oía desde niña y que muchos niños de hoy no han oído en su vida. Cada año, cuando empieza la serenata, una sonrisa aparece en mi cara. Para mí supone retomar ese contacto, ese acompasamiento de la vida del ser humano a los ciclos de la Naturaleza. Como alguien antes que yo ha dicho, hemos decidido venir a vivir a este sitio que es frontera entre la urbanización y el campo. ¡No le queramos poner puertas!

  8. Yo me siento MUY privilegiado por vivir en un entorno que me permite escuchar ranas, patos, etc.. Cuánta gente quisiera! De verdad.. no seamos tan urbanitas… si no queremos escuchar a la naturaleza, no vivamos en el campo.. vayámonos a vivir a otro sitio rodeados de asfalto, coches, etc.. Como decían anteriormente… las ranas ya estaban aquí, antes que nosotros…

  9. Difiero con lo que dicen algunos aqui. Las ranas las echaron a la charca el ayuntamiento de Aranguren. Ha sido una intervención artificial, no natural. Las iba a controlar la grulla que se suponía q tenía que venir por la zona, que no ha sucedido. Y de tres días nada. Croan durante más de tres meses y pico, de abril a julio. El ruido es muchas veces ensordecedor, no sé puede estar en la terraza. Y se oyen incluso con persiana bajada. No solo hay ranas en la charca grande, sino también en las de debajo de la colina de Mugartea. Muchos vecinos no somos urbanitas pijos, lo que queremos es descansar. Hablar también es algo natural para las personas, pero si hay cien debajo de tu casa gritando a las 12 de la noche, molestan. Pues esto igual. Un poco de control por favor.

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