Peligro plazas aparcamiento

Aparcar en Lezkairu se ha convertido en una maniobra arriesgada para algunos conductores. Al menos, en algunas de sus calles, que han visto como su tráfico aumentaba en estos últimos meses como consecuencia de varios factores. Por un lado, el progresivo aumento de población que está sufriendo el barrio con la llegada de sus nuevos vecinos. Y por otro, debido a que algunas de sus calles se han convertido en una zona de paso para los habitantes de localidades vecinas, como Mendillorri oMutilva.

El problema al que se enfrentan día a día los conductores que viven o trabajan por la zona se localiza en la avenida de Cataluña, vía principal del barrio junto a la calle Juan Pablo II. Esta calzada, que cuenta con dos carriles para cada sentido, está dotada con una serie de plazas de aparcamiento pintadas en ángulo recto con la dirección de la calle. Esto no es habitual en núcleos urbanos, o calles con gran densidad de tráfico, en las que se suele optar por darles algo de ángulo, para facilitar el estacionamiento y lograr así una circulación fluida.

Muchas mañanas, los conductores que frecuentan la zona se enfrentan a momentos de riesgo. Tanto los que deben estacionar su vehículo en una de esas plazas como los que circulan por la vía para acudir a sus puestos de trabajo tienen cada día que afrontar una situación que se agrava en horas punta. Raquel Paricio, una vecina del barrio, afirma que por el momento no ha visto ningún incidente pero que suele escuchar «bastantes bocinazos porque al aparcar, los coches invaden el carril contrario”. Raquel revela que ella suele evitar esa situación “aparcando el coche en el garaje«.

Pero todos los conductores no tienen la posibilidad de dejar el coche en un parking. Es el caso de Saioa Randez. La joven, que tiene que estacionar cada día en la zona porque trabaja en el barrio, explica que por las mañanas hay gran afluencia de vehículos en esa calle por lo que «los coches paran el tráfico” al tener que maniobrar para aparcar. «Yo al principio creía que había una razón para colocarlas así, pero creo que sería mejor que estuvieran algo inclinadas», afirma.

Aunque, como señalan los conductores, el mayor impedimento se encuentra «al sacar el coche de la plaza», por la dificultad para comprobar si se acerca otro vehículo por la vía. Leire Irisarri afirma que la orientación de las plazas «fue un error». «Es un problema que vimos desde el principio», recuerda.»Algún día va a haber algún susto». Sergio Ortega, un vecino de la zona, revela que, como muchos otros, él prefiere aparcar marcha atrás para así «intentar molestar menos al salir» y, a pesar de eso, tiene que hacer uso de los dos carriles de la vía.

La calle, una de las vías principales del nuevo barrio de Lezkairu, cuenta además con un pronunciado cambio de rasante por lo que es aquí donde los conductores se encuentran más inseguros al estacionar. «La visión es muy mala aquí y los coches, a veces, pasan a bastantevelocidad«, confirma Irisarri.

En estos últimos meses, las quejas de conductores y vecinos se han intensificado. Alegan que en una calle tan transitada, las maniobras se hacen cada vez más difíciles por lo que piden tomar medidas.

Tras contactar en numerosas ocasiones con el área deSeguridad Ciudadana del Ayuntamiento de Pamplona, sus responsables han preferido no pronunciarse al respecto.